La foto adecuada, cómo escogerla.

Has visto una escena interesante y disparas 30 fotos. Eso es fácil. Escoger la foto adecuada ya se complica un poco. Aquí explico cómo lo hago yo.

La fotografía digital nos ha dado la opción de disparar sin mucho problema de presupuesto. Con una tarjeta de memoria adecuada podemos disparar 1000 fotografías sin inmutarnos. Pero una vez que tenemos tantas fotos, hay que ser conscientes de que desechar es la mejor opción. Ya que saber escoger la mejor de una serie será lo que nos hará destacar esa foto del resto.

En este post quiero explicar un poco el proceso mediante el cual he escogido una foto de entre unas cuantas con la misma escena. Lo primero es explicar un poco la situación. Estaba yo paseando por el puerto de Barcelona, a mi derecha una gaviota relajada tomando el sol y de fondo un magnífico velero. Bien, tengo una foto. Eso pensé yo. Y así me dispuse a sacar mi cámara, en este caso un iPhone 6S Plus e intentar hacer la toma. Lo primero que hay que tener en cuenta al fotografiar animales es que las probabilidades de que hagan justo lo que tu quieres son mas bien escasas. Así que desde lejos empezé a disparar varias fotografías y mientras me estaba acercando y posicionando para sacar la mejor toma posible que el animal me dejara. Lo primero es acercarte y lo segundo agacharte. Y todo esto intentando no espantar al animal o que viniera otra persona espantando al animal y estropeando la foto. En esta situación realicé unas 10 fotos. Y el proceso de selección es lo que me dió la foto final.

Escoger la foto adecuada - Foto11. La primera foto.

En esta toma ya aparecen los elementos que quiero encuadrar. la gaviota mirando hacia la izquierda y el velero de fondo. Bien. Es lo que quería. Pero la alineación es bastante caótica. Ni el velero ni la gaviota están en la misma vertical, el velero por su parte tiene los mástiles cortados por arriba y la composición en general es bastante mejorable. Además para acabar de rematar aparece un trozo de banco donde sentarse en la parte de abajo a la derecha de la imagen. Nada, toca acercarse un poco más. Y así, tomar la siguiente fotografía.

Escoger la foto adecuada - Foto22. La segunda foto.

En esta segunda foto ya me voy aproximando al animal, pero éste ya se ha percatado de mi presencia. Me mira. Con calma. Todavía estoy lejos. Pero ya me tiene en su radar. Como en la foto anterior, la composición sigue siendo un desastre. Pero vemos como el animal y el barco poco a poco se van alineando en la vertical. El velero sigue sin entrar completamente en el plano teniendo sus mástiles cortados y en la posición central superior del encuadre, pues tampoco es que tenga mucha gracia ese velero. Y por último, el banco sigue apareciendo en la parte de abajo a la derecha de la escena. Hay que aproximarse más. Hay que encuadrar mejor.

Dicho esto mientras me voy acercando sigilosamente, intento agacharme un poco para cambiar el punto de vista natural a un punto de vista algo mas original a ras de suelo que además me permita mostrar el velero.

Escoger la foto adecuada - Foto3

3. La tercera foto.

En esta nueva toma ya he conseguido deshacerme del molesto banco de madera que me ocupaba gran parte del encuadre. Ya estoy algo más bajo y la línea del puerto que cruza parte del horizonte superior empieza a quedar mucho más interesante. Ahora ya están el velero y la gaviota alineados en la misma vertical  y además posicionados en el tercio izquierdo. Con esto ya estamos dándole algo de gracia a la foto con la regla de los tercios a pesar de ser una foto en formato 1:1 (cuadrada) para Instagram. La parte mala de esta foto es que los mástiles del velero siguen estando fuera de plano cortados en la parte superior y a la derecha superior ha aparecido un nuevo velero que desvía la atención de la foto. Así que tengo que seguir realizando más fotos.

A tener en cuenta que esto no es más que una dramatización de la situación real, en la cual a estas alturas ya he sacado 6 fotografías, pero como los cambios son mínimos, prefiero reducir para la explicación de este post. Una vez explicado esto, vamos a la siguiente foto.

Escoger la foto adecuada - Foto44. La cuarta foto.

¡Bien! ¡Ya la tengo! Bueno… Casi. En esta foto el encuadre ya me está gustado mucho más. El velero y la gaviota están al fin alineados en vertical. Posicionados en el tercio izquierdo de la fotografía. El velero aparece entero en la fotografía. Muy justo, el primer mástil está justo tocando la parte superior de la fotografía, pero está dentro. Y a la derecha ya he dejado el velero anterior que casi no aparece. Ya está casi. Pero el animal ha cambiado de pose, no se le aprecia el pico, está completamente de espaldas, tendré que volver a intentarlo. La pose ya la tengo, solo hay que hacer otro click. Y con eso pasamos a la siguiente.

Escoger la foto adecuada - Foto55. La quinta foto.

Al fin tengo «la foto». Si, es esta. Ya tengo a todos los elementos que quería dentro de la foto. Todos posicionados entre sí, bien encuadrados y en su sitio. Pese a haber unos cuantos fallos, éstos se pueden corregir con un reencuadre en el que eliminaré el velero de la derecha y reduciré algo de madera en muelle para que la atención principal se la lleve la gaviota. Que esta vez si que está bien posicionada con la cabeza mirando a la izquierda. El mismo tercio donde están posicionados el velero y el pájaro. Ya está, es la foto.

Pese a esto, sigo haciendo más y más fotos, hasta que el pájaro se espanta y desaparece del plano. Ya he perdido la oportunidad de hacer más fotos, así que es el momento de la edición. En este caso, me he esperado unos cuantos días ya que una vez vi las 18 fotos en el carrete de la cámara me pareció una buena idea para el blog. Y aquí estoy, escribiendo estas líneas.

escoger la foto adecuada - Foto5 Recorte6. El momento del recorte.

Tras haber escogido la foto adecuada, ésta presenta algunos problemas que se pueden corregir con el recorte. Por suerte la cámara del iPhone 6S Plus es lo suficientemente buena como para tener píxeles de sobras como para poder reencuadrar. Ésto mismo es por lo que resultan interesantes las cámaras digitales modernas de sensor grande con 50 o 100 Megapixels. Imprimir en un tamaño exageradamente enorme es una ventaja, pero poder recortar y reencuadrar una vez realizada la fotografía, es la mejor de sus ventajas.

En este caso el reencuadre se ha realizado para evitar que aparezca en plano el velero de la parte derecha. Éste resulta demasiado llamativo y quitándolo nos centramos en lo que interesa. Por otra parte en la zona de la izquierda, en el muelle de hormigón aparecía una persona en bicicleta que he preferido dejarla fuera del plano por completo, ya que al recortar la parte derecha y alinear el velero en el tercio izquierdo, ésta aparecía cortada. Así que mejor fuera por completo. De esta manera también cortamos algo de madera en la parte inferior de la fotografía y así conseguimos que los elementos principales sean solo los que queremos.

La gaviota, el mar y el velero apuntando al cielo gracias a la línea del muelle. Los elementos importantes. Una vez recortada, ya tenemos la foto que quería. Así que solo hace falta unos cuantos retoques de color para tener la foto que quiero, un poco de efecto de luz arriba y así poder acabar de escribir este artículo. Hora de subirla a instagram, un buen título, explicar que he escrito este artículo en el Blog, buscar el enlace y enlazar aquí:

https://www.instagram.com/p/BGW77N_n8pj/

 

Espero que os haya gustado y no olvidéis comentar, en el Blog, en Instagram, en Twitter o Facebook. Donde queráis, que para eso estamos en todas partes. Si os gusta este artículo y os interesa otro comentando las opciones de edición y las Apps que uso, decírmelo. Y una vez hemos realizado la selección viene la pregunta del millón: ¿Qué hacemos con las fotos desechadas?¿Las borráis o las guardáis?